Una monstruosa llamarada surgió de la superficie solar el pasado 24 de febrero. El fenómeno, considerado de clase 3,6 M por su pico de flujo de rayos X -la letra corresponde a la segunda más potente de la clasificación de las llamaradas solares-, se apagó en una hermosa y agitada erupción de plasma, que se prolongó durante 90 minutos.
Este evento fue capturado en luz ultravioleta extrema por el satélite de la NASA Solar Dynamics Observatory (SDO)
El Productor de Televisa Mexicana Jaime Maussan ha producido un documental fundamental de 53 minutos sobre la teletransportacion a bases secretas en Marte y la vida en Marte con Andrew D. Basiago, Laura Eisenhower y Alfred Lambremont Webre.
Los universos paralelos existen realmente, según el descubrimiento matemático efectuado por científicos de Oxford, descrito por un experto como “uno de los desarrollos más importantes en la historia de la ciencia”.
Se dice que la teoría del universo paralelo, propuesta por primera vez en 1950 por el físico estadounidense Hugh Everett, ayuda a explicar los misterios de la mecánica cuántica que han desconcertado a los científicos durante décadas.
En el universo de “muchos mundos” de Everett, cada vez que se explora una nueva posibilidad física, el universo se divide. Dado un número de alternativas posibles resultantes, cada una de ellas se realiza en su propio universo.
Un motorista que se libra por un pelo de un accidente, por ejemplo, podría sentirse afortunado de haber escapado. Pero en un universo paralelo, otra versión del mismo motorista habría muerto. Y en otro universo más veríamos al motorista recuperarse tras una estancia en el hospital. El número de escenarios alternativos es infinito.
Es una idea extraña que ha sido descartada como fantasiosa por muchos expertos. Pero la nueva investigación realizada en Oxford demuestra que ofrece una respuesta matemática a los acertijos cuánticos, por lo que no debería ser descartada ligeramente – y sugiere que el doctor Everett, que era estudiante de doctorado en la Universidad de Princeton cuando propuso su teoría – podría estar en el camino correcto.
Según comentarios del doctor Andy Albrecht (físico de la Universidad de California, Davis) en la revista New Scientist: “Este trabajo será acogido como uno de los desarrollos más importantes en la historia de la ciencia”.
De acuerdo a la mecánica cuántica, no se puede decir que algo exista a nivel subatómico hasta que no sea observado. Hasta entonces, las partículas ocupan una nebulosa de estados “superpuestos”, en la que estas pueden tener simultáneamente espines “arriba” y “abajo”, o aparecer en lugares diferentes al mismo tiempo.
Las observaciones parecen “forzar” a la partícula a adoptar un estado particular de realidad, en un modo similar a lo que sucede a una moneda que esté girando por el aire, y de la que solo se podrá afirmar que muestra “cara” o “cruz” una vez que se la atrape.
Según la mecánica cuántica, las partículas no observadas se describen como “función de onda”, y representan a un conjunto de múltiples estados “probables”. Cuando un observador realiza una medición, la partícula es forzada a adoptar una de esas varias opciones.
El equipo de la Universidad de Oxford, dirigido por el doctor David Deutsch, demostró matemáticamente que la estructura del universo (con bifurcaciones como un árbol) creada por el universo al dividirse en versiones paralelas de si mismo, puede explicar la naturaleza probabilística de los resultados cuánticos.
Del centro de nuestra Galaxia emanan dos enormes burbujas supersimétricas de Rayos Gamma, cubiertas de una capa exterior de Rayos X. Cada una de las esferas, tiene un diámetro de 25.000 años luz, por lo que supersimétricamente alcanzan la longitud equivalente a la mitad del diámetro aproximado de la Galaxia.
Este reciente descubrimiento, ha dejado perplejos a los cosmólogos oficiales, que especulan con la explicación de la posible activación del agujero negro central de la galaxia.
En tal sentido, Doug Finkbeiner, un astrofísico del Harvard-Smithsonian Center for Astrophysics (Cambridge) ha sido el primero en detectar el fenómeno y señala literalmente: ”We don’t fully understand their nature or origin.”
Finkbeiner y su equipo descubrieron las burbujas mediante el procesamiento de los datos públicos disponibles del Telescopio Fermi en el espectro más sensible y con mayor resolución de detecciones de rayos gamma más avanzado que existe. LAT (Large Area Telescope) . Los rayos gamma y en segundo lugar, los rayos x son las formas más altas de energía procedentes de la luz.
La estructura de la dispersión logarítmica de la emisión de las partículas, es incompatible con un “jet” de partículas procedentes de la activación de un agujero negro activo. De alguna manera, estamos contemplando un fenómeno absolutamente diferente a nada conocido hasta la fecha, pero que claramente desafía las teorías del “caos” puesto que realmente obedece a un patrón de supersimetría perfecta.
La explicación más convincente por el momento, la ofrecen Finkbeiner y su equipo :
Las burbujas despliegan un espectro con altos picos de energías mayores que los niveles difusos de rayos gamma habitualmente vistos en el espacio. Adicionalmente las burbujas aparecen claramente rodeadas de un borde de radiación x que actúa como corteza. Ambas dos cualidades conjuntamente, sugieren que la estructura ha aparecido de una forma súbita, como un evento impulsivo.
Siguiendo esta línea de explicación de Finkbeiner, (por el momento la más convincente) frente a la teoría de formación residual de estrellas procedente de hace millones de años, estaríamos tal vez, ante la primera prueba de emanaciones del aether (Eter) procedente del centro de la Galaxia, algo que desde tiempos muy recientes lleva siendo objeto de estudio por parte de la radiofrecuencia cuántica diferencial. ¿Sería precísamente ese tipo de energía la que permite curvar el espacio tiempo, generando realidades supersimétricas en un flujo logarítmico coherente con la modificación de las partículas fundamentales.?
¿En qué se basa Finkbeiner para afirmar su hipótesis del efecto impulsivo?
En concreto, resumiremos la hipótesis de Finkbeiner en las dos premisas fundamentales que están presentes en el exhaustivo informe científico de su equipo :
1ª.- La simetría norte-sur de las burbujas, no encaja con la lógica de los denominados “jets” de los agujeros negros, por lo que claramente, ni el ancho, ni el largo, ni lacomposición, son típicas de los jets, que están mucho más comprimidos al igual que los ángulos de los “jets” forman un cono doble mucho más estrecho.
En la figura, puede verse claramente cómo se diferencia un “jet” (en naranja) de un agujero negro de las burbujas ( capa verde rayos x; y azul rayos gamma) analizadas por Finkbeiner .
2º.-Pero lo que realmente sorprende junto a lo anterior es la estructura logarítmica de dispersión en el interior de las burbujas, algo que Finkbeiner ya conoce a nivel de física teorética, y que es consciente de su transcendencia, puesto que implica la presencia de osciladores armónicos. (impulsos).
En la zona gris sombreada de las diferentes zonas de las burbujas, se encuentra la clave por la que Finkbeiner queda extrañado: Osciladores armónicos en el interior de la burbuja y en todas las direcciones de ésta, desde dentro hacia fuera de forma logarítmica.
Por las dos razones claramente expuestas, señala:
Ambas dos cualidades conjuntamente, sugieren que la estructura ha aparecido de una forma súbita, como un evento impulsivo.
La admisión de este planteamiento desde el punto de vista científico, implica necesariamente la revisión de los conceptos clásicos de la física, toda vez que este descubrimiento implica necesariamente reforzar la teoría del Dr. Paul Laviolette, (Supergravitics), cuyas previsiones han ido cumpliéndose con el paso de los años, demostrando una vez más la solidez empírica del modelo propuesto.
Un grupo de científicos descubre un nuevo organismo capaz de vivir en arsénico, un hallazgo que servirá para buscar formas de vida fuera de nuestro planeta.
Se trata de una bacteria de la familia ‘Halomonadaceae’ que es capaz de vivir y crecer alimentándose enteramente de arsénico. Se trata del primer microorganismo conocido capaz de usar un líquido tóxico para sostener su crecimiento y la vida, según publica la revista ‘Science’ y se ha dado a conocer en una rueda de prensa convocada por la Agencia Espacial de EEUU.
El arsénico es un elemento muy tóxico para los organismos vivos, pero químicamente se comporta parecido al fostato. Todos los seres vivos que se conocen tienen en común unas bases bioquímicasen las que aparecen fosfatos, fundamentales en la formación de nucleótidos, los monómeros del ADN y el ARN, que forman la base de la materia viva.
¿Cómo afecta a la búsqueda de vida fuera de nuestro planeta?
La bacteria encontrada ha ampliado la lista de los lugares donde se puede encontrar vida, lo que da a la NASA una pista nueva e importante para buscarla fuera de nuestro planeta. «Nuestro hallazgo nos recuerda que la vida tal y como la conocemos puede ser mucho más flexible de lo que podemos imaginar»,ha manifestado la investigadora Felisa Wolfe-Simon, que lidera la investigación.
Hasta ahora se pensaba que la vida requería seis elementos: carbono, hidrógeno, nitrógeno, oxígeno, fósforo y azufre. Ahora hay otro, el arsénico, lo que convierte a esta bacteria en la única forma de vida descubierta que podría vivir fuera de la Tierra.
¿Dónde encontraron la bacteria?
El equipo de la científica Felisa Wolfe-Simon encontró la bacteria en el Lago Mono (California), donde abundan las aguas con lodos ricos en arsénico. La bacteria encontrada no sólo vive en el arsénico, sino que es capaz de incorporarlo a su ADN.